En México no hay una norma o ley que regule los criterios que deban tenerse en cuenta para que un producto sea considerado como natural. La legislación europea señala que la “cosmética natural” difiere de un país a otro, por lo que la industria cosmética, ante los dilemas legislativos, recurre a criterios de empresas privadas de certificación que garantice el carácter natural o ecológico de los activos cosméticos. Es por eso que cada organismo certificador tiene sus propios criterios de exigencia y es posible obtener más de una certificación.
Los principales organismos certificadores europeos son ECOCERT en Francia, BDIH en Alemania, Demeter o Soil Association en el Reino Unido. En Estados Unidos se encuentra USDA ORGANIC.
El nivel de exigencia de ECOCERT es más riguroso que la reglamentación convencional, lo que garantiza el respeto al medio ambiente a lo largo de toda la cadena de producción y así poder lograr productos de calidad ecológica superior.
ECOCERT certifica dos categorías de productos cosméticos:
a) Cosmético natural: deberá cumplir las siguientes condiciones: que un mínimo del 95% del total de los ingredientes (incluyendo el agua) sea natural o de origen natural. Como máximo el 5% restante pueden ser ingredientes de síntesis (éstos forman parte de una corta lista restrictiva que incluye algunos conservadores y sustancias auxiliares). Como mínimo el 5% del total de los ingredientes procede de agricultura biológica, que representa como mínimo el 50% de los ingredientes vegetales.
b) Cosmético natural y ecológico: como mínimo, el 95% del total de los ingredientes debe ser natural o de origen natural. Como máximo, el 5% restante pueden ser ingredientes de síntesis que forman parte de la lista restrictiva. Un mínimo del 10% del total de los ingredientes procede de agricultura biológica, que representa como mínimo el 95% de los ingredientes vegetales.
COSMOS es una norma europea que garantiza que los ingredientes provienen de la agricultura ecológica y no se han utilizado productos químicos sintéticos para cultivar estos ingredientes.
El Estándar COSMOS establece criterios innovadores, desafiantes y progresivos para los cosméticos ecológicos y naturales en los que los consumidores pueden confiar y que son claros para la industria y buenos para el medioambiente.
Soil Association, es principal organismo de certificación de productos ecológicos en Inglaterra, es una asociación no gubernamental que controla y promociona la agricultura orgánica y sustentable. Sus criterios también se aplican a la industria cosmética e incluyen requerimientos sobre el contenido de ingredientes orgánicos y de síntesis, y el impacto medioambiental de la fabricación, entre otros aspectos. Solamente certifica productos orgánicos.
BDIH fue creada en 1956, es la federación de empresas industriales y comerciales farmacéuticas, de productos dietéticos, complementos alimenticios y cosméticos que certifica cosméticos naturales, no orgánicos. El certificado BDIH exige que los ingredientes de origen vegetal sean ecológicos, aunque admite excepciones siguiendo criterios de disponibilidad y calidad; los ingredientes de origen animal no están permitidos si se trata de vertebrados.